Páginas

Seguidores


jueves, 2 de mayo de 2013

*

Desaparezco, voy y vengo.
La verdad, no quería volver. Por primera vez, puedo decir que el gimnasio, la facultad y el novio que tengo a medias, me estaban quitando todo el tiempo disponible. Al punto tal que llegan las 12 de la noche, y me empiezo a quedar dormida sola, hasta las 8 que hago todo  nuevo.
No me molesta semejante ritmo de vida, comer apurada para salir a la facultad, después de haber estado mínimo 2 horas y media en el gimnasio. Me encanta, al contrario.
Es más, he mejorado en muchas cosas: casi no cuento calorías, aunque lo siga haciendo por hobbie y para tranquilizarme pensando que, aunque como lo que quiero, sigo comiendo muy poco. Pero, si un día no cuento calorías porque estoy demasiado cansada como para ponerme a escribir en mi diario, no importa, me duermo igual.
Podría decirse que ya no sentía la necesidad de escribir acá, no obstante lo cual sigo leyéndolas compulsivamente, pero no comento, porque no me da el tiempo, realmente.
Sin embargo, vuelvo a escribir, y por qué? Porque parece que en todas partes, este tema de la comida, no me deja en paz.
Tengo una compañera de la facu, que parece estar en pleno apogeo anoréxico, y me pone un poco de los pelos, porque se compara conmigo. Y me molesta, porque no podemos ser comparadas. Somos cuerpos diferentes, de alturas diferentes, y objetivamente ella es delgada. Entonces, como me recuerda a mí misma hace unos años, me pone mal, porque lo que se pierde, porque me molesta que quiera asemejarse a mí, que no soy una silfides ni mucho menos, me molesta... ¿Será envidia? La verdad, me lo estuve planteando, y puede ser un poco. Pero capaz no es envidia, capaz es que no me veo mejor aunque vaya al gimnasio y que no tengo idea de cuanto peso (mil kg seguro), y me molesta que ella esté tan informada sobre su cuerpo y yo no tener idea. Es más, casi no me miro al espejo, y mucho menos desnuda, porque me da miedo ver algo que no me guste. Si me veo para vestirme, o desnuda de a partes, pero completamente sin nada, no. Falta que me asuste y quiera cortarme hasta el alma...
Por eso vuelvo, porque aunque ya nadie me lea, creo que tal vez sí pueda leerme alguien de este mundillo y que me entienda. A mi novio no puedo contarle ninguna de estas cosas, porque acabara por pensar que es un retroceso, y va a controlarme mucho más lo que como o no como, y no me conviene, porque no hago las cosas mal y porque si estoy comiendo poco y cualquier cosa lo alarma.
En fin, espero pasar más seguido. :)
Voy dejar thinspo por todas partes, porque me alegran mucho. :D


Así quisiera verme yo! 


2 comentarios:

Ninfa Ñakyra dijo...

Holaaa! Gracias por tu coment, ahora mismo te sigo, por cierto, de que ciudad sos? Yo soy de Villa Mercedes, San Luis.

Con respecto a tu entrada, ahora que descubrí tu blog voy a leerte, al menos yo, y estoy segura que hay muchas personas más.

Aprendé a querer a tu cuerpo, al menos por momentos, o al menos a no odiarlo. Yo estoy aprendiendo a quererme y peso como 20 kilos más que vos. Animo!

Anónimo dijo...

Holaaa!! Yo sí te leo aunque me tarde porque a través de tu perfil no puedo entrar a tu blog, así que tengo que memorizar tu dirección para entrar más seguido :D No me fijé ahora si me aparece tu actualización :/

Te entiendo un montón con lo de esa chica. Yo creo que es un disparador, eso pasa. Pero bueno, estás haciendo haciendo las cosas mejor, no es cuestión de competir en algo tan personal. Tratá de sacártelo de la cabeza!! Seguí como vas si te hace bien y listo, qué le importa a ella o a los demás? Que no sea cosa de que empieces a restringir más por "competir" o porque te activa/dispara ehh Estás re linda nena, no creo que estés muy diferente (léase gorda).

Un beso!!!


No estoy orgullosa de lo que soy, creo simplemente que ha llegado el momento de admitir lo que soy. Soy una loca enferma que quiere entrar en jeans talle 34, y pesar 50 kg de aire. Nada más. Soy una loca enferma que espera a vivir del amor y del aire. Soy una loca enferma que a veces dice exactamente lo contrario frente a la gente, pero qué mas da? La vida la vivo yo, y es solamente mia.
La rabia, la procesión, el miedo y la tristeza pasa por mi interior. Y eso es lo que se ve acá.