Por eso, decidí tampoco pesarme la semana pasada, y estos días (desde el sábado, porque mi día de pesarme es el viernes), intenté hacerlo bien. Ayer, fue un desastre, comí: un alfajor Águila y pastafrola de la mamá de mi novio, no es lo que normalmente como y por un día no se muere nadie, peeeeeero, lo malo es que comí eso a la noche, y me da cosa comer eso tan tarde. Es como que siento que me hinchó de más, engordo el doble, y no voy a poder ir más al baño porque me tapo con harina... Es mi sensación. xD
Pero, ayer, aún con el alfajor en la panza, y vestida con borcegos (que creo que pesan solos casi 1kg), me subí a la balanza. Y sigue marcando 55kg, así que, tranquila. Tal vez pese menos por el tema de que estaba vestida y digiriendo. Me queda, entonces, hacerlo bien estos días, y volver a pesarme el viernes en condiciones. :) Me siento muy bien, al menos, no he engordado tanto como creía.
El problema que se me presenta es que me voy de viaje unos días, y a donde voy hacen comida casera y en cantidad. Si bien se han acostumbrado todos a que yo coma un solo plato, y encima pequeño, no puedo evitar las comidas o hacerlas más livianas: en casa ajena, se come lo que haya, o no? Y eso sumado a que no voy a poder hacer ejercicio, no sé cómo irá a resultar.
Pero, me tengo fe con el control.
Entre otros temas, estuve pensando qué quiero hacer con mi vida alimenticia, a dónde quiero llevar mi dieta. Porque, convengamos, comer poco no es algo sostenible a largo plazo sin que te produzca problemas de salud, aún cuando el problema no llegue a diagnosticarse como anorexia, bulimia, u otra enfermedad así. Pero, no me veo capaz aún de comer como una persona normal y saludable. Es más, ayer comí unos caramelos sola y me sentí repugnante por hacerlo así, como a escondidas.
Mi idea es llevar mi dieta a un desayuno completo, un almuerzo moderado, y líquidos el resto del día. Nada más. No quiero comer más que eso, y me sentiría bien poder comer eso durante lo que me queda de vida. No por ello no voy a hacer concesiones saludables cuando haya alguna fecha especial. Pero me doy cuenta de que me siento cómoda comiendo restrictivamente, más allá de que como lo suficiente como para no morir de inanición, pero no me siento mal. Podría vivir así mucho tiempo más.
Como dije la entrada anterior, soy adicta a la sensación de hambre, a levantarme a desayunar medio descompuesta de la falta de comida, siento que así disfruto un poco más el acto de comer, que, debo decir, me importa bastante poco últimamente. Ya no siento que me antoje de algo, siento que nada de lo que existe como opción alimenticia me satisface.
Loca, loca, estoy loca. xD
En fin, hermosas, éxitos para lo que queda de semana! ^^
Fuerzas para todas!